miércoles, 14 de diciembre de 2011

Las palabras de amor de los locos dirigidas a los maniquíes...musas

Las palabras de amor de los locos dirigidas a los maniquíes...musas

Te aferras a tu áncora y evades los reflejos sondeados de las brillantes lágrimas de la luna en el agua en calma. Luna y agua que desean tu vista y no tu huida, pero te escondes en el sol que deja sólo suspiros de sombras...sos poca luz en la noche, silueta sin dónde que se desvanece...
Olisqueo, busco, miro, confabulo, indago y no, nada en hay en tus prendas más que indetectables huellas de un fantasma incorpóreo y tangible, y nos besamos con lisonja hipócrita las mangas de las camisas... La elegancia en el cadáver, la muerte debajo de las flores.
Pero no logramos escondernos. Nos distinguimos demasiado, nuestros ojos macilentos, nuestro cuerpo enjuto, nuestra piel acartonada y nuestros músculos entiesados por una capa de plástico...vivimos en el pecho del fingir. Somos atados a la voz de letargo militar, a las dudas con misión cumplida en tus gritos y el demacrado aspecto de nuestros rostros...tristeza en las pieles lánguidas como el mar sin prisa ni perturbación...paz, agónica paz en los rincones de papel en los que quedan un S.O.S, un auxilio en el desierto que es tapado por una tormenta que sólo deja dunas.
Condena de fin quimérico. Sentencia en la abstinencia de nuestros deseos más crueles tapados por las mangas, mangas que cubren, que tapan, que disfrazan, las cortadas horizontales y verticales que recorren desde la mente infante a nuestros cuerpos adultos. Tus costillas se marcan y tus movimientos resaltan la debilidad de tu organismo anémico.
Pero nuestras quejas sólo son una palabra pueril para el que no lo entiende o bien lo entiende con los barrotes en la mente y en los ojos. Sentirse solo es un estado propio inculcado por un factor ajeno...
Sos una puta, con pechos de puta, con besos, con labios, con caricias de puta. Sos la almirante de la tristeza y la presidenta de mis nostalgias. Sos nigromancia pura, o así le digo, o así le llamo, a lo que no veo. Vos que no sos corpórea ni tangible, pero que a mi me dejas una tangible y perceptible nostalgia...fantasma de noche sin luna, sin luz y sin día...amas al día porque yo no sueño en los días, porque no te veo, no te siento...pero en mi haz dejado recuerdo, y a tu imagen sigo sin reticencia y, hago del seguirte mi faena impenitente e indefectible, por eso soy etéreo al definirte a vos que sos etérea, por eso soy poeta y vos sos musa...por eso te amo, por eso te odio y, no te dejo, y te sigo a tu áncora, y te veo los vidrios de espejo, y te veo...pero siempre se me olvida tu rostro cuando despierto sin tus labios y en mis ojos ya no están los tuyos...
Las palabras de amor de los locos dirigidas a los maniquíes...son dirigidas a ti
fin

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